Guía exprés para abrir tu centro de belleza y estética en franquicia




Guía exprés para abrir tu centro de belleza y estética en franquicia

Empecemos por algunas cifras que evidencian el peso de este mercado de la belleza. En su informe ‘Belleza y cuidado personal en España: valores al alza’, Stanpa (Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética), el sector de perfume, cosmética y cuidado personal contribuyó en 2023 al crecimiento del consumo privado de forma decisiva, con una subida del 12,1%, “cuatro veces superior a la media”.

Esta relevancia también se manifiesta en los empleos que genera (cerca de 300.000) y en el hecho de encontrar a lo largo de nuestra geografía alrededor de 15.000 perfumerías especializadas, 50.000 salones de peluquería, 22.300 centros de belleza y 22.100 farmacias y parafarmacias.

Otro dato que nos acerca a su realidad es que cada español consumió al año 206 euros en productos y servicios de esta naturaleza, “concentrado, especialmente, en el cuidado  personal”.

Conocido el entorno global, nos dirigimos al sistema de franquicia para pulsar el estado actual. Y para Sonia Pérez, responsable de Expansión de D-uñas, un ejemplo que ilustra la pujanza de la estética y la belleza son los hábitos de consumo de los más jóvenes. “Cada vez compran más productos cosméticos, tanto de maquillaje como de cuidado de la piel y del cabello, y todo lo que tenga que ver con la belleza de manos y pies crea tendencias en ellos; lo observamos más en la mujer, aunque también están cambiando los hábitos en el hombre, un nicho que está aumentando de forma paulatina”.

Franquicias de estética y belleza: rentables por fuera y por dentro

En el escenario descrito, identificamos a continuación aquellas variables que, más allá de la excelencia en el servicio –algo que se presupone a cualquier marca solvente–, determinarán el crecimiento sólido y sostenible de una cadena, algo en lo que se debería fijar ese potencial asociado que se está planteando entrar en el sector: 

Un paso por delante

Subraya Belén Mahiques, directora de Expansión del Grupo Provalliance, que es vital adelantarse a la demanda del mercado y diferenciarse de la competencia. “Para conseguirlo, es muy importante la formación continua de los equipos y la gestión del personal, la instrucción de la tecnología y la digitalización del negocio; en este sentido, hay que trabajar con la información que nos da el dato [conseguido con la IA], para crear estrategias mas efectivas, dirigidas tanto al cliente final como a la gestión de negocio”.

Métricas en cadena y el cliente en el foco

“También es determinante el seguimiento por parte del franquiciador en cuanto a cumplimiento de protocolos de marca, así como el seguimiento de los Kpi´s del plan financiero”, añade Mahiques.

La personalización ha de ser parte en la ecuación del éxito, según Javier Pelayo, Chief Global Franchising de Alma Corporation. “Y no sólo en color, sino en corte o en tratamientos, ya que cada cliente quiere ‘su’ servicio”. Lo cierto es que el precio ha dejado de ser importante y, por encima de todo, está el servicio profesional. A partir de aquí, nuestros estilistas pueden recomendar, según características del cliente, tendencias y usando a veces modelos de IA, lo que más le conviene en cuanto a estilo y color”. 

Un cliente, por otro lado, que fue protagonista en esta mesa redonda de los Desayunos Emprendedores, donde profundizamos en las claves general para captarlo y fidelizarlo.

Una experiencia genuina

Relacionado con el punto anterior, Pelayo reflexiona que la adaptación de horarios, nichos y perfiles son los que marcan la diferencia en la conveniencia. ¿Pero cómo se traslada esto al modelo de negocio? “La clave radica en tener los centros abiertos donde y cuando el usuario pueda acudir, el perfil de los estilistas adecuado al perfil del cliente y, según la marca, dar un servicio individualizado, respondiendo a la expectativa de esa persona que acude a cada una de las marcas. Por ejemplo, Dessange ofrece el servicio de maquillaje al finalizar el corte y color, algo que no es común en España”. 

Uso intensivo de tecnología

Esto ha de ser una constante en pro de extraer el máximo rendimiento al modelo de negocio, algo que beneficiará de forma inmediata al franquiciado. Y sus aplicaciones son múltiples, como detalla Pelayo. “Desde la IA, para ver tendencias y generar programas de fidelización, hasta usar los datos de GIS [una base de datos de información geográfica] para ubicar un centro, analizar datos de competidores y realizar campañas inmediatas con personas que pasan cerca de los establecimientos con el teléfono móvil, pasando por campañas con Google referidas a una zona o región concreta”.

Algo único… de verdad

Uno ha de analizar si esa marca en la que se ha fijado es realmente diferente, el gran desafío que aborda hoy cualquier franquicia de este segmento. “En nuestro caso, esa diferenciación viene dada por dos elementos”, explica Mahiques. “Por un lado, estar siempre a la última en tendencia, presentando dos colecciones al año por marca, introduciendo los servicios más innovadores y los mejores productos. Por otra parte, está la formación; y el gran reto aquí es la formación en management o gestión de negocio y de personas, algo que ya estamos introduciendo y está teniendo una gran acogida”.

Y otro desafío mayúsculo es “seguir manteniendo el negocio en los índices de rentabilidad objetivo, a pesar del aumento de los costes”.

Principales tendencias en estética–belleza

Una vez radiografiadas las costuras de un proyecto sólido, un par de tendencias que contribuirán a reforzar la actividad. “Observamos un incremento de la demanda por parte del público masculino y joven, nichos antes menos demandantes de este tipo de servicios”, destaca Mahiques. “Aumenta la preocupación por todo lo relacionado con la salud y el bienestar, un contexto donde podemos aprovechar oportunidades, trabajando sobre la parte de salud con la introducción, en nuestro caso, de la salud capilar en nuestros salones de peluquería; en este sentido, nuestros estilistas ya son profesionales del cuidado del cuero cabelludo”. 

En paralelo, “la globalización ya es una realidad, a través de plataformas como Instagram, con las que se llega a muchos más públicos y mucho más lejos, además de permitirte seleccionar y dirigirte de forma más eficiente al público objetivo a través de influencers y embajadores de las marca”.

Adelanta Pérez que las principales tendencias en la industria de la estética para 2025 incluyen tecnología de belleza orientada a la sostenibilidad, ingredientes limpios, marketing inclusivo, recomendaciones personalizadas y un uso más inteligente de los productos para el cuidado de la piel, manos, uñas… “En paralelo, emergen beneficios enfocados tanto a usuarios como a todo el personal que trabaja en nuestro sector. E incluso la tecnología de belleza, impulsada por la Inteligencia Artificial va a ser un paso importante en el amplio mundo del cuidado personal”.